El error de cálculo político de Evo Morales

El Padrón Electoral inadecuado y un posible fraude electoral, apenas son pretextos y creo los últimos que le quedan a la oposición para evitar la consolidación del proceso político iniciado por el MAS en 1995.

Por otro lado, creo haber sido un error de cálculo político la huelga de hambre iniciada por el presidente de la república, Evo Morales.

El presidente se equivocó, porque mismo sabiendo que no tiene oposición política en el país, continuó actuando con el mismo guión oposicionista, o sea, el enfrentamiento sin sentido.

Creo que la “oposición” (así entre comillas por que en realidad no existe oposición en el país) está derrotada y, ante la falta de una figura para hacer frente a Evo Morales en las próximas elecciones del 6 de diciembre, se aferra al boicot puro y simple en el Congreso, dígase en la Cámara de Senadores.

Con referencia al padrón electoral, es el mismo que fue utilizado en los últimos referendos y en los que el gobierno salió ampliamente vencedor.

Si hay aumento de electores en cantones, provincias, comarcas, etc, etc, eso se debe a que el gobierno (en un juego político inteligente) convirtió en ciudadanos a centenas de millares de campesinos que siquiera sabían que eran bolivianos. Eso no es fraude, es reconocer derechos, cosa que los actuales “oposicionistas” de turno se olvidaron, no se si a propósito, de hacerlo cuando retenían el poder.

Con relación a los ciudadanos bolivianos que viven en el exterior y que tienen, sí, el derecho legítimo de votar, ellos debieran acudir a los consulados nacionales, como lo hacen todos los ciudadanos del mundo, inclusive los españoles, país que inspiró a la ex “media luna” en lo que se refiere a las autonomías.

Es difícil el fraude en el exterior, pues todos los bolivianos se conocen y saben exactamente lo que hace cada uno de ellos.

Digo eso porque este escriba vivió 30 años en el exterior del país.

Creo no haber vuelta, el proyecto del MAS se está consolidando y las elecciones de diciembre próximo serán la coronación de ello.

Aquellos ciudadanos bolivianos que son contrarios a Evo Morales están sin rumbo, porque todos los argumentos oposicionistas pierden sentido al ser defendidos por personas que ya estuvieron en función de gobierno y no hicieron absolutamente nada de aquello que ahora defienden.

Nos gustaría que haya en Bolivia una oposición ideológicamente organizada y practicante, con capacidad para hacer frente a los actuales gobernantes. Pero, al contrario, los cabezas de la oposición son gente que no lee, que no sabe lo que es la practica política, que no conocen la historia del país y que, encima, está dividida.

Por eso me extraña el error de cálculo político de Evo Morales.